10 julio, 2006
Felicidades Enrique
Hace unos días escribí en esta página acerca de lo vital que está la participación política de los jóvenes en el PSC-PSOE. Tan es así que ha suscitado un debate animado e interesante. Es la prueba más evidente de que está cuajando con entusiasmo una nueva generación que mucho tiene que decir y hacer en la vida pública de nuestra ciudad.
Claro que esto será dar continuidad a lo que ya es una trayectoria normalizada de la vida de los partidos en una democracia consolidada. Y llegados a este punto, igual que echamos una mirada al presente y futuro con optimismo, también quiero hoy, porque es un día especial, traer al presente una trayectoria fecunda, de compromiso, de sacrificio, de solidaridad y de esperanza. Es de justicia reconocer su trabajo excepcional a quienes han contribuido a conseguir esta normalidad.
Hoy, Enrique Carrillo Medina, presidente de la Agrupación Socialista Juan Negrín de Telde, cumple 83 años.
Enrique no sólo es el presidente de la Agrupación. Es un compañero honesto. Una persona que hace 66 años se afilió a las Juventudes Socialistas en Marruecos, donde residía con su familia. Perdió a un hermano en la guerra posterior al golpe de estado del 36. Se implicó en la defensa de unas ideas en la clandestinidad. Se jugó su libertad y su vida en una célula que organizaba la ayuda a los exilados por Franco tras la guerra. Soñó muchas noches con que España recuperaba la legalidad democrática, la libertad republicana.
Enrique, socialista elegante, perdonó y puso por delante la reconcialiación cuando tras la muerte del dictador se abrió la oportunidad de recuperar la democracia, aunque significara renunciar a la República. No olvidó ni ha dejado nunca de ser republicano. Pero nos ha enseñado durante más de treinta años a muchos aquí en Telde el valor de la democracia, del entendemiento, pero también el de la dignidad y el del orgullo de ser socialista.
Hoy Enrique nos sigue enseñando que tenía razón el doctor Juan Negrín cuando decía que resistir es vencer. Lo sabe bien. En los últimos 30 años ha militado en la UGT y en el PSOE en Telde. Y a pesar de sus siempre confesadas ideas, es una persona respetada por todos. Él ha sido testigo resistente de malos ratos para la familia socialista en España y especialmente en esta ciudad. Ahora, cuando las cosas pintan mejor, muchas veces me mira en silencio con la sonrisa de satisfacción que exhibe quien demuestra que tenía razón.
Enrique representa en esta cadena de la vida que es también la historia del Partido Socialista Obrero Español el eslabón que conecta el tiempo de los sueños de hace 75 años con los que en estos momentos se están haciendo presente. Lo mejor, que aún sigue en activo.
Felicidades Enrique.
