26 julio, 2006

 

Ninguneo del deporte

El deporte hoy no es sólo una cuestión de competición. Ha entrado en otros ámbitos como el del ocio, el de la socialización y, de forma especial, en el de la salud.

En nuestra ciudad se ha hecho un esfuerzo reconocible desde 1979, con nuestro añorado Paco Artiles como primer concejal del área en las corporaciones democráticas, por hacer de la actividad deportiva un exponente de una sociedad vital, que quiere superarse, relacionarse y vivir en condiciones más sanas.

En estos 27 años de trayectoria democrática se han incrementado notablemente las infraestructuras deportivas y el personal dedicado a esta actividad. Se ha multiplicado de manera exponencial el número de personas que hacen deporte por alguna de las razonas expuestas al comienzo.

Estas cosas son apreciables con echar un vistazo a las estadísticas. Al igual que con echar un vistazo a las instalaciones deportivas y escuchar a monitores y, sobretodo, a usuarios, podemos apreciar cómo está decayendo a pasos agigantados lo que se ha construido durante estos años por la acción de los concejales anteriores (Paco Artiles, José Antonio Medina y Gumersindo Hernández).

Se ha parado la construcción de instalaciones deportivas previstas en el plan de obras. Pero además, se están descuidando las que están en funcionamiento. Puede comprobarse esta situación haciendo el recorrido que han hecho algunos jóvenes socialistas que comprobaron los desperfectos en instalaciones deportivas de Jinámar, de La Pardilla, de La Garita…

Pero tal vez el caso paradigmático de este descuido se puede apreciar en el Polideportivo señero de nuestra ciudad, el Paco Artiles. La suciedad, los desconches y humedades en algunas paredes, las cucarachas correteando por los materiales que son usados en las distintas actividades son elementos habituales en esta instalación. Algunas personas han reconocido que han contraído incluso herpes en los vestuarios.

Junto a esto, el maltrato recibido por los monitores del Club Adal, que han sufrido una represalia política en toda regla, forman el cuadro completo del significado que para los actuales mandatarios tiene el deporte: ninguno.

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